marzo 06, 2009

A Quien Corresponda

Nunca se sabe a quién se escribe.
Si el primero que me lee soy yo, y al primero a quien busco complacer es a mí mismo sería fácil hallar el perfil de aquel al que buscan mis palabras. Pero cada día me vuelvo un loco diferente, escurridizo, capaz incluso de burlar mis propias pasiones, y me pregunto entonces si lo que escribo es para mí en domingo atrapado entre ventanas y paredes, o para mí en una tarde de lunes en la procesión del tráfico bajo un aguacero.
Supongo entonces que es a esos locos contradictorios, de humores que van y vienen como el clima, a quienes apunto estas líneas. Certeras sí, porque nunca saben a dónde se dirigen.